Para los que van a conocerlos a partir de este cuatrimestre, ellos son La Raymundo, que rinde honor en su nombre a Raymundo Gleyzer, cineasta argentino desaparecido a manos de la dictadura militar en 1976. Actualmente ocupan nuestro centro de estudiantes (CEAA). Te acercamos a ellos con esta entrevista.
¿Cuáles son sus ideales? ¿En qué consistió la campaña?
Si bien no venimos en representación de ningún partido, tenemos nuestras tres líneas políticas que son anti imperialismo, latinoamericanismo y feminismo. Nuestro eslogan es: “¿Cine para qué?”, y básicamente en eso consiste nuestra agrupación; en reflexionar sobre nuestro rol como trabajadores y trabajadoras de la cultura en los medios audiovisuales. Nuestra campaña básicamente consistió en hacer actividades durante todo el año; visibilizarnos y también darle a la facultad lo que nosotrxs pensamos que le
falta, que son, otro tipo de actividades y espacios de encuentro en donde podamos
debatir y construir otra manera de hacer cine.
La Raymundo nace de los estudiantes de la facultad que decidimos organizarnos a raíz de no encontrar espacios donde nos sintiéramos cómodos y cómodas. Entonces decidimos crear una organización que permitiera, de alguna manera, volcar todas las ganas que teníamos. Por lo que es fundamental, dado que somos estudiantes de la Universidad y la agrupación nació de lxs estudiantes mismxs. Partiendo de eso, lo que nos gustaría es que no solamente puedan participar lxs compañerxs de La Raymundo, sino toda la Universidad en general. Nuestro principio, fundamentalmente, es romper con la democracia representativa y trabajar la democracia participativa, para que lxs compañerxs de la facultad y el estudiantado entiendan que las cosas van a cambiar cuando participen; que si solamente es poner un voto cada año, vamos a seguir condenados a hacer lo mismo. En cambio, si participamos en las secretarías, en las comisiones, y tenemos asambleas masivas, vamos a tener mejor calidad en un montón
de cuestiones. Entonces ese es el principio.
En estos dos meses de gestión, ¿cuáles fueron sus proyectos cumplidos y cuáles están en proceso?
Es muy loco, porque en realidad el Centro lo tuvimos durante las vacaciones. O sea, el espacio físico y demás, todavía no lo pudimos activar. Igual, hablando con el Secretario Académico, logramos una cosita, que es que antes, por ejemplo, si necesitabas un aula tenías que pedirla con dos días de anticipación; ahora vamos a habilitar una planilla (que estamos en proceso de diseñarla) en donde vos podés anotar tus datos, con tu número de documento, las entregás a los no docentes y a partir de eso, cualquier aula que esté en desuso, podés utilizarla, ya sea para un ensayo con un actor, para tener una reunión grupal, o para cualquier cosa. Lo que sí, la planilla sirve para que alguien se haga cargo si hay daños en el espacio o algo así. Es una formalidad que antes no existía, así que es como un logro, pero en realidad es muy chico para lo que
apuntamos.
Además, creemos que otra cosa, que todavía no hemos logrado pero que es nuestro primer objetivo, es que la estructura que está planteada en el estatuto del Centro de Estudiantes se conozca, ya que implica cumplir un montón de normas y deberes, y plantea que el estudiantado debe participar en las diferentes secretarías que existen. Son cinco secretarías que piensan diferentes aspectos que tienen que ver con el estudiantado. Entonces, la idea fundamental es abrirlas para que lxs compañerxs puedan entrar a militar a una secretaría puntual, en algo que les guste. No sé, si te interesa modificar algo que tiene que ver con equipos, o algo que tiene que ver con proyecciones en el patio, siempre hay una secretaría que puede encargarse de eso; entonces pueden venir a participar sin necesidad ni de ser de La Raymundo o de ninguna
agrupación. Sino de ser un estudiante genuino que activa su Centro.
¿Ya asistieron a alguna marcha en representación de nuestro Departamento? ¿A cuál?
Sí, fuimos a la vigilia cuando se discutió en el Senado la Ley de la IVE. También estuvimos en la marcha de Santiago Maldonado, y también en la del repudio a las
Fuerzas Armadas.
¿Y cómo fue la experiencia? ¿Los acompañaron varios alumnxs de acá?
En la de Santiago Maldonado podríamos decir que no tantos. No hubo tanta llegada. En la vigilia fue en la que más participación hubo, porque además instalamos una carpa grande que pudimos gestionar, y nos encontramos con unas compañeras. Ahí compartimos la carpa junto al Centro de Estudiantes de Dramáticas también, entonces permitió que la gente de la facu tuviera un espacio donde ir a, por lo menos, refugiarse de la lluvia, a guardar una mochila. Creo que tener un espacio físico en la vigilia, que
eran tantas horas, requirió más participación.
Para terminar, ¿cuáles son sus expectativas para este año que tienen por delante?
Es muy loca esa pregunta (risas). En principal, que aumente la participación estudiantil. Ese es un objetivo básico para poder empezar a construir de otra manera, porque en realidad, los objetivos nuestros van a ser los objetivos de todo el estudiantado que se
manifiesta a través de la Asamblea.
En base a nuestras tres líneas políticas, claramente un objetivo va a ser hacer una facultad más feminista, más latinoamericanista y menos imperialista. Todo esto viene a través de actividades culturales: va a seguir el ciclo de cine feminista (igual esa es una actividad de La Raymundo, no como CEAA), también gestionaremos talleres, actividades que hagan todo lo que no tenemos en el plan de estudio (que es bastante estadounidense y comercial), tratar de resignarlo de otra manera hasta que podamos cambiarlo. También otras maneras de absorber conocimiento: el año pasado estuvimos haciendo talleres de Dirección de Actores que eran muy didácticos, eran mucho trabajo con el cuerpo. Buscamos otras maneras de aprender más allá del aula,
del profesor como autoridad y vos escuchando. Apuntamos a eso.
Como pensarlo también, en varias dimensiones, queremos que la Universidad sea un espacio en el que se pueda estar en términos físicos. Creemos que es muy fría, no solamente porque hace frío, sino porque te ofrece muy poco para que vos te puedas quedar; entonces queremos trabajar mucho en eso, que haya comodidad, que haya la posibilidad de tener un buffet para que la gente pueda almorzar. Nosotrxs caracterizamos en términos nacionales que existe una crisis, fomentada por el gobierno de Mauricio Macri, y creemos que una posibilidad es luchar contra esa crisis en la calle, pero otra también es la posibilidad de encontrarnos en la solidaridad. Entonces, como Centro de Estudiantes, nos parece importante combatirla desarrollando un menú popular para que lxs estudiantes no tengan que ir a comer al McDonald’s de a la vuelta, o a otro lugar mucho más caro; sino que sientan que en el Centro pueden conseguir algo rico y económico, y además un lugar donde sentarse a
tomar algún café y leer.
Por otro lado, nos interesa mucho trabajar en lo que tiene que ver con el plan de estudios, y con el tipo de carrera en la que nos estamos formando. Nosotrxs creemos que es un debate que vamos a dar hasta que exista La Raymundo y es sobre todo para preguntarnos para qué hacemos cine y cuál es nuestro rol en la sociedad. Creemos que son preguntas muy básicas que muchas veces no se reflexionan en la Universidad. Y como agrupación nos interesa también, porque además concebimos que una cosa es ser el Centro de Estudiantes y ser la conducción del Centro, y otra cosa es La Raymundo. Nos interesa seguir formándonos en la interna, seguir teniendo un proceso de aprendizaje más grande, que más compas se puedan sumar y que sea también una expresión de la posibilidad de que otra forma de hacer política en la Universidad se pueda dar. Ese sería otro objetivo fundamental, que a un año de gestión quede demostrado que había otro camino posible y que por lo menos intentamos transitarlo a partir de si sale bien o no, pero bueno, por lo menos nos arriesgamos.
La Raymundo ganó el Centro de Estudiantes el 23 de junio de este año, con 232 votos. Pueden encontrarlxs en la fotocopiadora, donde también hay un microondas, un
horno eléctrico, una heladera, pavas eléctricas, café, té y mate.
Entrevista: Ornella Rossi
Transcripción: Bárbara Gómez
Fotografía: Sofía Pais
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